|Sueños
rotos |
La
niña insiste. Les recuerda que es Navidad y pregunta si puede pedir un deseo, sólo
uno. Ellos le contestan que no puede ser, que ya han hablado de eso. La niña
sigue a lo suyo como si no escuchara,
trepando por las perneras hasta acabar recostada en los hombros del más alto.
Juega, salta, se desternilla.
-Que
sí, que tenéis que venir conmigo al colegio… y al parque… y también a casa;
para que mamá no me regañe, para que los otros niños no se rían, ¡para que
nunca más me llamen mentirosa!
Luego
desciende, retoza sobre la hierba y los mira con ojitos almibarados:
-
Un deseo –repite- , sólo uno.
-
Nadie puede saberlo – aseveran, los dos, al unísono.
La
niña llora compungida y les grita que todos se burlan de sus historias. Que le
llaman “niña engañadora”. Les recuerda que siempre acaba pasando lo mismo,
que ni siquiera la sirena quiso acompañarla.
Los
gigantes, cabizbajos, desaparecen entre
las montañas.
© Xavier Blanco 2012.
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Esta es mi participación mensual en ...
esta noche te cuento.
Aquí podéis leer el resto de relatos participantes. El tema de este mes era ...aquella navidad de niño.
Qué bueno Xavier. Me gustó.
ResponderEliminarPobre niña, mira que son estos gigantes, no acompañarla al mundo de la realidad...
Un saludo indio
Mitakuye oyasin
Tremendamente tierno. Es una pequeña joyita infantil.
ResponderEliminarHoy juegas con la fina linea que separa la imaginación de la realidad, lo ficcionado de la historia, la historia de la ficción. Historia de gigantes para una niña que probó primero con una sirena y ahora se siente traicionada por los seres que habitan en sus sueños.
ResponderEliminarComo te han dicho, Xabier, una pequeña joya infantil.
Un abrazo desde este año que aún no acaba.
Si es que en el mundo real somos unos asquerosos que no creemos si no vemos, y aun así a veces... je je.
ResponderEliminarUn abrazo Xavier, un relato muy bonito.
La línea entre fantasía y realidad que un niño tiene, es tan fina, que nadie entre los gigantes la puede ver.
ResponderEliminarPena que luego se quede todo tan aparentemente dividido.
Felices fiestas y genial 2013. Un abrazo.