Semana a semana sigue transitando el concurso "relatos en cadena" que organiza La Escuela de Escritores y la Cadena SER. Sólo 100 palabras y la frase de inicio de esta semana era "Como tantas veces había hecho de niño". La musa sólo me dio para un relato, sin éxito...espero que os guste. Seguiremos probando suerte. La final mensual del mes de Octubre la ganó Montse Aguilera, una buena amiga, no dejéis de visitar su blog Letras para pasar un rato.
Carne picada...
Como tantas veces había hecho de niño, cogió
el cuchillo de descarnar y empezó su tarea de
matarife. Los animales no dejaban de gritar. Observó entristecido la
nave: inmensa, solitaria, fría. Se secó las lágrimas y continuó su
labor: degolló, descuartizó, evisceró. Maldito ruido. El gruñido de los
cerdos formaba parte indisoluble de su vida. Se quitó el
delantal, limpió el cuchillo y se lavó las manos. Era su último día de trabajo.
Cuarenta años de servicio sólo habían merecido una patada en el culo. Apagó la
luz en el mismo instante que la cabeza del Gerente era engullida por la
trituradora. Se reía.
© Xavier Blanco 2011.
La frase de inicio para la próxima semana es: "Y nada más existió hasta el próximo tren".
La frase de inicio para la próxima semana es: "Y nada más existió hasta el próximo tren".
Menudo micro macabro Xavier. Ahora que, muy justiciero. Esos cerdos no se merecen otra cosa, mira que despedirlo después de 40 años. Me ha gustado mucho. Mar Horno.
ResponderEliminarSi es que ya sabemos que a todo cerdo le llega su San Martín ;)
ResponderEliminarVoy a pasar a ver a Montse también, para darle la enhorabuena por ese gran logro!
Me gusta, me gusta.
ResponderEliminarMe parece un final sorprendente y en tu línea reivindicativa.
Un buen rato el de ayer.
Yo también me he presentado, pero tengo que buscar un dibujo que le vaya bien... O no.
Al final tendré que hacer entradas como ilustrador y otras como "microrrelatista". Así me evito estos quebraderos de cabeza.
De nuevo felicidades por el micro.
Hemos estado hablando con Mònica y creo que podríamos hacer algo entre todos. Yo tengo varias ideas... mi cabeza no para. Creo que podríamos quedar un día a tomar algo para hablar de ello.
Un saludo.
Xavier, la vida del matarife es así, llena de sangre, aunque la del gerente sólo la desean. Muchas veces no se valoran los años de servicio como debieran, el presente es lo que importa.
ResponderEliminarMe gustó.
Un abrazo.
Justo acabo de poner un "me gusta" en el facebook, en el micro de 140 caracteres que colgaste sobre este matarife resentido en La Bòbila, y me encuentro con esta genial versión más amplia. Realmente macabro. Tenía que demostrarle al jefe que él era el mejor descuartizador!!
ResponderEliminarUn abrazo, Xavier. Ya ves, he vuelto otra vez por aquí :-)
Acabo de ver tus minimicros en la página de Facebook de La Bòbila. Me gustan, me gustan, me gustan. Yo he mandado varios a traves de Twitter pero no se han publicado todavía. Me ha gustado tu versión corta del micro ReC. Mar Horno
ResponderEliminarNo me imagino ese día en que la vida laboral se acabe, o me echarán a patadas del trabajo o me dedicaré a actualizar 50 blogs, jejeje.
ResponderEliminarUn beso,
Quejica
http://soyquejica.blogspot.com
Buena manera de irse después de semejante despedida, jajaja
ResponderEliminarMe parece un micro muy conseguido.
Besitos
Hola a tod@s, gracias por pasar y por comentar.
ResponderEliminarMar, ¿macabro? pero si esto pasa cada día en mi ciudad, "hay mucho gerente cabroncete que acaba convertido en salchiha...
Maite, es que el refranero no falla, donde se ponga la cultura popular que se quite la enciclopedia.
Fernando, una alegría verte por aquí. Estoy deseando escuchar tus ideas y compartirlas...
Nicolás, vivimos en un mundo donde sólo se valora lo inmediato, lo efímero, el resto no tiene ningún valor, y las personas cada día se asemejan mas a simple mercancía...
Un abrazo
Sara, me alegra y mucho verte por aquí y compartir tus comentarios. Este matarife es un gran profesional, el mejor sin duda...Siguen buscando al gerente...
ResponderEliminarMar, que susto, creía que era una alucinación, has vuelto...
Quejica, siempre tan positiva, yo al ritmo de blogs que sigo, ni cuando me jubile -o me echen- los podré seguir todos. Gracias por pasar.
Elysa, donde las dan las toman, y este matarife es un señor de mucho carácter...
Un abrazo
Cierto. No pasamos de ser números, y cuando estos no cuadran, nos tiran al cubo de la basura.
ResponderEliminarPotente micro, Xavi.
Sangriento, vengativo y justiciero.
ResponderEliminarBuen micro, Xavier
El relato es bueno, lo que pasa es que quizás la dedicación "desde niño" es un poco increíble. Pero a saber cuáles son los criterios de selección. Otra vez será. Es solo una opinión.
ResponderEliminarMe ha parecido un micro magnífico, Xavier. Árido, con cierta veta fantástica que le queda muy bien. Por qué será que nos identificamos con cada desempleado? Cuando veas las barbas de tu vecino cortar...
ResponderEliminarAbrazos!
Excelente micro, Xavier, con un final magnífico.
ResponderEliminarÁcido, crudo, incluso cruel, pero que nos lleva a empatizar con el protagonista, por muy asesino que sea. Eso es arte.
Un abrazo.
Guau! Cómo me ha gustado esta historia! Y qué garra tiene!
ResponderEliminarTienes que dedicarte a esto.
Un abrazo
Alberto, me dedico a eso que llaman RRHH y los principios y valores, eso de "las personas lo primero" está muy bien hasta que los números no salen. A partir de ahí las personas son menos que nada...
ResponderEliminarL.P. gracias por pasar, justiciero vale, ¿sangriento?...es una bellísima persona...
Ximens, sí, me costó la primera frase, pero lleva 40 años, su padre era matarife, su abuelo también, pero claro eso no lo sabía el jurado.
Patricia, es una lacra, tanta gente sin poder trabajar, sin tener una vida digna, sin alborear un futuro...
Pedro, gracias. En estos micros de principio obligado, te la juegas en el final...el personaje es entrañable, yo me imaginé un señor gordito, con bigote, y la mujer y los chavales en la puerta para irse al parque...
Ana, verte por aquí es una gran alegría, y si te ha gustado el micro, pues mejor.
Un abrazo a todos por pasar y por comentar.
No conocía esta faceta sangrienta tuya, je,je,je. El "se reía" del final ¿a quien se refiere? ¿al jefe o al matarife? No me gusta pedir explicaciones de los micros, pero en este caso me tiene intrigada, por eso del que ríe el último ríe mejor.
ResponderEliminarUn abrazo,
Hola Esperanza, Me gusta la pregunta. Se reía el jefe, cuando su cabeza entraba por la trituradora se seguía riendo "yo estaré muerto,pero tu estás en la puta calle". Sí, se reía el Gerente, la vida es así...
ResponderEliminarUn abrazo
Pues me gustaba mucho también para quedar entre los primeros. Me gusta mucho la descripción de esa nave fría, ese espacio desagelado.
ResponderEliminarPero esta semana había mucho nivel. Que no siempre es así.
Un saludo, Xavier.
Terrorífico relato que nos lleva, entre vísceras chorreantes, a las oscuras recámaras de la venganza. Muy bien ambientado y resuelto, Xavier. Un abrazo.
ResponderEliminarMiguel Angel, los concursos ya se sabe...influyen demasiados elementos...pero lo mejor es pasarlo bien escribiendo y compartiendo con vosotros...
ResponderEliminarFrancisco, me alegra verte por estas páginas, la venganza es un plato que se sirve frío, en este caso frío y triturado...
un abrazo a los dos